Caso Turismo Joven - PP

El Caso Turismo Joven, también conocido como Caso Consorcio Turisme Jove, constituye una investigación de corrupción que destapó un desvío de más de un millón de euros en fondos públicos a través del Consorcio de Turismo Joven de las Islas Baleares durante la última legislatura de Jaume Matas como presidente del Govern Balear (2003-2007). La trama de corrupción provocó la quiebra técnica de la institución pública y afectó gravemente al proyecto del albergue juvenil de Sa Vinyeta en Ciutadella (Menorca), presupuestado en 2,3 millones de euros, del que solo se llegaron a pagar unos 500.000 euros, quedando una deuda de 1,8 millones de euros tanto al Consell de Menorca como a las empresas constructoras.

El caso salió a la luz en agosto de 2008 cuando la Conselleria de Juventud y Deportes detectó irregularidades en la gestión del Consorcio durante el segundo mandato de Matas. Los Servicios Jurídicos del Govern iniciaron una investigación que posteriormente fue trasladada a la Fiscalía. La investigación reveló que los responsables del consorcio cobraron comisiones por la adjudicación de contratos y crearon empresas interpuestas expresamente para defraudar a la administración, obteniendo de fondos públicos el reembolso de gastos personales mediante facturas fraudulentas.

Los doce acusados en el juicio llegaron a un acuerdo de conformidad con la Fiscalía Anticorrupción, aceptando sus responsabilidades penales. Juan Francisco Gálvez, director general del consorcio, y Damián Amengual, gerente de la institución, fueron condenados a 3 años de prisión, mientras que Juan Francisco Gosálbez, jefe de servicios, fue condenado a 3 años y 7 meses. Todos se declararon culpables de delitos de malversación de caudales públicos, fraude a la Administración y prevaricación administrativa. En el caso de Amengual y Gosálbez se añadió además el delito de cohecho. Los otros nueve acusados recibieron penas menores sin ingreso en prisión.